Redacción La Prensa San Diego 
El grupo Consorcio de Derechos de Inmigrantes en San Diego solicitó al Gobernador de California Jerry Brown crear un campamento que de albergue a todos los ciudadanos que han llegado durante los últimos meses desde Haití, África, y América Latina.
Los lugares para que estos ciudadanos se refugien al obtener su permiso para cruzar a Estados Unidos no se dan abasto, y solo una iglesia en El Cajon Boulevard ofrece ayuda a esta comunidad para dormir y resguardarse de forma oficial.
Ginger Jacobs, abogada en temas de migración y presidenta del Consorcio de Derechos a Inmigrantes, aseguró desde mayo hasta mediados de agosto más de 4,000 migrantes han sido autorizados para llegar a la Unión Americana, esto gracias a un permiso humanitario, que en promedio les da licencia para permanecer en el país por tres años.
“Hay miles de personas, en su mayoría originarias de Haití, que vienen aquí después de haber trabajado en Brasil. Con la desestabilización económica y política por allá, estos están saliendo de Brasil y viniendo acá a Estados Unidos”, explicó Jacobs.
Gran parte de este grupo de haitianos tiene familia en Florida y Nueva York. A pesar de la ubicación de sus familiares en la Unión Americana, estos refugiados están entrando aquí a San Diego porque es la manera más directa de llegar por tierra.
El consorcio dijo que a más tardar será el 18 de septiembre cuando el Gobierno estatal de California presente planes especializados de campamentos en los que apoye la Guardia Nacional y la Cruz Roja. Con este plan, se buscara administrar de la mejor forma posible los recursos y apoyos de organizaciones de caridad que se entregan a los más necesitados.
Aún no se tiene definido el espacio donde se montará este campamento en San Diego.
Solo el pasado 12 de septiembre más de 1,500 migrantes llegaron a la ciudad de Tijuana. La Secretaría General en el estado de Baja California asegura que más de 6,000 han llegado durante este 2016 en busca de una mejor calidad de vida en la Unión Americana.
“Tenemos a personas de muchas nacionalidades que llegan a los puertos de entrada en Calexico y San Ysidro”, informó Aduanas y Protección Fronteriza por medio de un comunicado.
La situación asegura Jacobs es posible que empeore con el paso del tiempo, sobre todo ante los cambios que se viven en el mundo.
“Probablemente necesitamos más recursos para el gobierno. Yo personalmente he estado en el puerto de entrada y veo que se hace todo lo posible por estas personas. No es falta de cooperación del gobierno o de Aduanas y Protección Fronteriza, ellos están haciendo todo lo máximo que pueden, pero necesitan más recursos para resguardar y proteger a los migrantes. También las organizaciones de caridad necesitan más recursos para cuidar a esas personas”, agregó Jacobs.
Por lo pronto, mientras las autoridades federales en Estados Unidos realizan los procesos para otorgar asilo político y permisos humanitarios a los migrantes que llegan a los puertos de entrada al país.
Es primordial que toda persona, sin importar su situación migratoria, conosca sus derechos básicos. Estos derechos incluyen no ser deportado hasta que un juez lo determine, una audiencias frente a un juez, no ser detenido o arrestado sin razón alguna y no ser inspeccionado sin motivo aparente.