LA COLUMNA VERTEBRAL
El Soporte Informativo Para Millones de Hispanos
Por Luisa Fernanda Montero
Por estos días y hasta mediados de octubre, los hispanos somos protagonistas. A lo largo y ancho de Estados Unidos se celebran nuestras costumbres, nuestros aportes, nuestra raza.
Desde Washington, el presidente Barack Obama proclama que desde los primeros tiempos de la república, los hispanos hemos escrito páginas cruciales de la historia nacional y cuando escuchamos hablar de cosas cruciales, tendemos a pensar en cosas grandes, monumentales, admirables, y si, tal vez estemos alineados, pero son muchas las cosas cruciales que no tienen mucha publicidad y no por ello dejan de ser admirables.
Es pertinente, entonces, recordar nuestros logros comunitarios y celebrar el legado de líderes como Cesar Chávez, que nos enseñó que nunca debemos abandonar nuestros sueños, que toda vida es valiosa y que aquellos capaces de reconocer la humanidad que nos es común son capaces de cambiar el mundo.
Pero es pertinente también, y necesario, celebrar a los millones de hispanos que día a día hacen de este, un país mejor. A las madres que educan, a los padres que proveen, a los jóvenes que estudian y creen en su futuro, a los activistas que luchan por los derechos de todos. A los hombres y mujeres que aman y que entregan lo mejor de si, en su hogar, en su trabajo en su comunidad.
La herencia hispana se celebra desde que en 1968, el presidente Lyndon B. Johnson declaró una semana en septiembre como la Semana Nacional de la Herencia Hispana. La celebración se extendió en 1988 a un mes entero, del 15 de septiembre al 15 de octubre. Así que vamos a celebrar.
¡Vamos a celebrar nuestro mes! ¡Vamos a celebrar nuestra herencia!
Vamos a celebrar la alegría que nos caracteriza como pueblo. Vamos a celebrar a los millones de trabajadores inmigrantes honestos y capaces que día a día contribuyen a la prosperidad y el desarrollo de este país y a todos aquellos que a través de su arte, su oficio o su sonrisa, hacen que sea cada vez mejor.
¡Vamos a celebrar nuestra hispanidad! Vamos a celebrar que somos la minoría más grande de este país y que cada vez no solo somos más si no mejores.
Este es un momento crucial para nuestra comunidad que continúa luchando por la aprobación de una reforma migratoria justa, equitativa y comprensiva que saque de las sombras a los miles de inmigrantes indocumentados que también, día a día, aportan al crecimiento de este país.
Hemos dado mucos pasos certeros, pero el camino se extiende, por eso el llamado es además a la reflexión. ¿Qué estamos haciendo por lograr ese objetivo común? ¿Qué estamos haciendo por que nuestro entorno sea cada vez mejor?
¿Estamos trabajando por el bienestar de nuestra comunidad? ¿Rendimos honor a nuestra hispanidad con nuestros actos cotidianos?
Solo usted tiene las respuestas, por ahora, esta es nuestra fiesta. ¡Vamos a celebrar!