<figure id="attachment_38261" aria-describedby="caption-attachment-38261" style="width: 300px" class="wp-caption alignright"><a href="http://laprensa-sandiego.org/etc-etc-etc/sporting-news/cobardes-y-mal-p…; rel="attachment wp-att-38261"><img loading="lazy" class="wp-image-38261 size-medium" src="http://laprensa-sandiego.org/wp-content/uploads/2017/01/crisis-jaguares…; alt="crisis-jaguares-chiapas" width="300" height="187"></a><figcaption id="caption-attachment-38261" class="wp-caption-text">Jaguares de Chiapas</figcaption></figure>
<p></p>
<p>¿Trabajarías para una empresa que te debe tres meses de sueldo y que al pagarte te engaña dándote cheques sin fondos?</p>
<p>¿Trabajarías para una empresa que te prohíbe hacer un contrato con otras compañías que te ofrecen mejor salario y mayores prestaciones?</p>
<p>¿Trabajarías para un empresa que cuarta tus derechos de asociación para pelear por tus derechos laborales?</p>
<p>Creo que nadie de nosotros estaríamos dispuestos a enfrentar esas condiciones de trabajo en ningún lugar, pero eso es exactamente lo que sucede con los equipos de la Liga MX.</p>
<p>El futbol mexicano se ha convertido en una especie de feudo en el que los dueños de las franquicias disponen de sus trabajadores como si fueran siervos.</p>
<p>El caso de Jaguares de Chiapas es increíble en esta época en donde las leyes y derechos laborales se han modernizado en todo el mundo.</p>
<p>Varias veces, la directiva del cuadro chiapaneco ha caído en incumplimiento de pago a sus jugadores, a veces hasta por tres meses.</p>
<p>Cuando los futbolistas de Jaguares han tratado de levantar su voz para exigir lo que les corresponde, el dueño del equipo, Carlos López Chargoy, los amenaza y los extorsiona.</p>
<p>Al más puro estilo del latifundismo mexicano, Chargoy le hace ver a sus jugadores que si se quejan públicamente de su situación, él hará todo lo posible para destruir su carrera profesional.</p>
<p>Ante la actitud tirana de su jefe, los integrantes de Jaguares optan por bajar la cabeza y aceptar las vejaciones de las que son objeto.</p>
<p>La semana pasada, Rafael Márquez, zaguero mexicano referente histórico del FC Barcelona, reveló que está por conformar el primer sindicato de futbolistas mexicanos.</p>
<p>Márquez quiere que casos como el de Jaguares no se presenten nunca más en la Liga MX, pero el capitán de la selección mexicana y actual jugador del Atlas se ha encontrado con un problema inusitado.</p>
<p>La resistencia para la creación del sindicato no proviene de los dueños de los equipos, sino que viene de los propios futbolistas.</p>
<p>Márquez dijo que existe un temor muy grande de parte de sus colegas de unirse para formar el sindicato.</p>
<p>El internacional mexicano admitió que sus compañeros de profesión tienen miedo de ser vetados de por vida si se unen a su movimiento.</p>
<p>La sumisión de los futbolistas mexicanos es la parte del problema que a mí más me preocupa.</p>
<p>No es posible que que los jugadores rechazan la gran oportunidad histórica que Márquez les está ofreciendo encabezar.</p>
<p>El jugador mexicano prefiere la sumisión, prefiere bajar la cabeza, prefiere quedarse callado, antes de enfrentar con valor y coraje a sus lugartenientes.</p>
<p>Los futbolistas mexicanos han crecido bajo un sistema impositivo que les prohíbe firmar un contrato con el equipo que ellos quieran y en el que no tienen las herramientas legales para exigir se les paguen sus sueldos atrasados.</p>
<p>Los jugadores mexicanos no tienen el valor de iniciar un movimiento revolucionario que destruya el sistema que los oprime y los explota.</p>
<p>Mientras el futbolista mexicano siga siendo dócil, manejable y obediente, los señores feudales seguirán abusando de ellos.</p>