LA COLUMNA VERTEBRAL
El Soporte Informativo Para Millones de Hispanos
Por Luisa Fernanda Montero
Los alimentos contaminados causan cerca de tres mil muertes en Estados Unidos cada año. El descuido, la falta de limpieza y de sentido común, pueden ocasionarnos muchos problemas.
De acuerdo con el Servicio de Inspección y Seguridad de los Alimentos del Departamento de Agricultura de Estados Unidos, FSIS, las enfermedades causadas por la ingesta de alimentos en mal estado, portadores de bacterias nocivas u organismos patógenos, usualmente comienzan con síntomas similares a los de la influenza o la gripe, como nauseas, vómitos, diarrea y fiebre. Estos síntomas pueden aparecer minutos o semanas después de la ingesta.
Ciertos microorganismos dañinos pueden estar presentes en alimentos crudos como carnes, mariscos, huevos, verduras y frutas; e incluso pueden llegar a nosotros después de haber pasado por el proceso de cocción si este no se realizó adecuadamente.
La higiene y la temperatura en los lugares destinados a almacenar y preparar los alimentos es fundamental. Una carne, por ejemplo, que no alcance las temperaturas adecuadas al ser cocinada puede ser muy peligrosa. La temperatura del refrigerador debe estar a 40 ºF (4.4 ºC) o menos y en el congelador a 0 ºF (-17.8 ºC) o menos.
Todos los asados, filetes y chuletas, de carne de res, cerdo, cordero y ternero, deben alcanzar una temperatura interna mínima de 145 ºF (62.8 ºC) al ser cocinados. Siempre es recomendable controlar las temperaturas con un termómetro para alimentos. Las carnes molidas de res, cerdo, ternero y cordero, deben alcanzar una temperatura interna de 160 ºF (71.1 ºC) y todas las aves de 165 ºF (73.9 ºC).
Otros conocidos enemigos de nuestros alimentos son los hongos. Aunque algunos no son peligrosos, no se recomienda oler alimentos que los tengan, ya que pueden causar problemas respiratorios. Descarte el alimento si está cubierto con hongos, limpie el refrigerador o la despensa donde fue almacenado y verifique los artículos próximos al alimento que pudo haber tocado. Los hongos se dispersan rápidamente en frutas y vegetales.
La FSIS indica que deben descartarse las carnes frías que tengan hongos como tocinetas o salchichas y sobrantes cocidos de carnes y aves.
Las Frutas y vegetales, firmes, como el repollo o las zanahorias, entre otros, pueden utilizarse después de cortar al menos una pulgada debajo del área donde creció el hongo. El cuchillo no debe tocar el hongo para que no contamine otras partes del producto. Pero si el hongo está presente en frutas y vegetales, suaves, como pepinillos, melocotones o tomates debe ser descartado ya que frutas y vegetales con alto contenido de humedad pueden estar contaminados debajo de la superficie.
Salamis y jamones secos y curados, pueden utilizarse después de raspar el hongo de la superficie. El pan, los productos horneados, la mantequilla de maní, las legumbres y las nueces deben descartarse.
En suma, para proteger su salud y la de su familia recuerde que mantener limpia su cocina puede evitar focos de contaminación relacionados con diversas enfermedades. Cambie frecuentemente los limpiones o paños de limpiar y las esponjillas que puedan albergar patógenos.
Los residuos en el horno microondas y el refrigerador deben limpiarse tan pronto como aparecen. La limpieza externa e interna del refrigerador debe realizarse al menos una vez por semana, descartando los alimentos que han alcanzado la fecha de vencimiento o los restos de comida de más de cuatro días.
No olvide lavarse las manos antes y después de procesar alimentos y usar el sentido común, la prevención puede evitarle muchos dolores de cabeza… y de estomago.
Para saber más visite http://www.fsis.usda.gov. Encontrará toda la información en español.