Entérese, el síndrome es real

LA COLUMNA VERTEBRAL
El Soporte Informativo Para Millones de Hispanos
Por Luisa Fernanda Montero

    Hay muchas cosas en la vida de las que usted está seguro, pero seguramente a la hora de entender a las mujeres, algunas veces, tal vez más de las que quisiera, se siente digamos algo confundido.

    Me encantaría estar en capacidad de disolver sus dudas, que a la postre son causa de grandes amores y objeto de infinitas investigaciones, pero me declaro incapacitada para hacerlo. Lo que si puedo y me dispongo a hacer con la esperanza de ayudarlo un poco en el proceso, es hablarle de uno de los causantes de que a usted se le vayan las horas, pensando por que su esposa, su novia, su amiga o su hija actúan así o asa.

    El dichoso Síndrome Premenstrual es el nombre que se le ha dado a un amplio rango de síntomas emocionales y físicos que se presentan días antes de que una mujer inicie su ciclo menstrual cada mes. Dichos síntomas pueden apa-recer de 5 a 11 días antes del periodo y desaparecer, poco después del inicio del mismo.

    Lamentablemente para nosotras, para ustedes y para la ciencia en general no se han identificado las causas exactas que generan este trastorno, sin embargo, los expertos tienden a creer que los cambios de los niveles hormonales en el cerebro tienen algo que ver.

    Sea cual sea la causa, lo cierto es que en determinados periodos del mes, un alto porcentaje de mujeres —algunos creen que hasta el 75% de la mujeres en edad fértil—  se ven agobiadas por molestos síntomas físicos, emocionales y de comportamiento que no sólo las sacan de quicio si no que pueden llegar a afectar seriamente su desempeño familiar y profesional.

    Entre los síntomas físicos sobresalen la distensión abdominal, el estreñimiento, la diarrea, la sensibilidad extrema en las mamas, el dolor de cabeza o la intolerancia a estímulos como el ruido o las luces.

    Pero además una mujer que padece el síndrome premenstrual, puede tener una marcada tendencia a la confusión, dificultad para concentrarse, aumento en los sentimientos de desesperanza, tristeza, ansiedad, nerviosismo, irritabilidad e incluso hostilidad y agresividad.

    En algunas mujeres puede haber una perdida de impulso sexual y en muchas los síntomas incluyen sentimientos de culpa, baja autoestima, letargo, falta de energía, altibajos en el estado de ánimo e insomnio.

    En pocas palabras, una tormenta emocional y física tiene lugar en un cuerpo que a pesar de ello tiene que seguir funcionando en  un entorno social que en la gran mayoría de los casos no contempla ni comprende la existencia de esta condición. Muy mal.

    “No es ninguna excusa en absoluto, es un síndrome que está muy bien estudiado y que ocurre en un porcentaje no muy alto de mujeres, pero en las mujeres en las que ocurre es un problema tremendo porque afecta mucho la relación de la familia y sobretodo la relación matrimonial”, señala el ginecólogo, oncólogo y cirujano de la Clínica Mayo Javier Magriña.

    El doctor Magriña recomienda que para atenuar los síntomas – y sus consecuencias – las mujeres se sometan a tratamientos hormonales, sustitutivos de estrógenos o incluso quirúrgicos como la extirpación del útero en ciertos casos.

    El especialista insiste en el manejo médico de la situación porque para  la mujer en muchos casos es imposible controlar los síntomas psicológicos.

    Un estilo de vida saludable es el primer paso para el manejo del síndrome premenstrual. La comprensión que la mujer encuentre en su entorno seguramente le será de gran ayuda. Recuerde que en la salud de la vida de pareja está la salud de la vida familiar. La buena comunicación es indispensable para darle solución a asuntos  sencillos que de ser desatendidos pueden convertirse en grandes problemas.