Ismo | La Prensa

Barack Obama es el Presidente de Estados Unidos y como tal tenemos el derecho a oponernos a sus políticas, pero también tenemos el deber de respetarlo a él como persona y a la posición que ocupa.
 Obama está tratando de reformar el sistema de salud de Estados Unidos, algo que todos los presidentes desde Woodrow Wilson han querido hacer y ninguno lo ha logrado.
 Los conservadores que se robaron el partido Republicano quieren derrotar los esfuerzos de Obama de reformar nuestro sistema de salud con la idea de que un triunfo contra Obama se convertirá en ganancias en las elecciones del 2010.
 La maquinaria de los mercaderes de mitos y mentiras está trabajando arduamente para convencernos de que Obama quiere destruir la nación. El mensaje de estos charlatanes es que no debemos promover competencia y eficiencia en el sistema de salud. Como buenos nor-teamericanos debemos continuar dándole a las empresas de seguros médicos 700,000 millones anuales para que cubran el 50% de la población.
 El ex presidente Bush le regaló 700,000 millones a las empresas farmacéuticas para que nos dieran unas cuantas drogas más baratas y nadie protestó. Obama quiere hacer lo mismo con el resto del sistema y es un fascista, un socialista o no es norteamericano.
 Personalmente, encuentro estos epítetos ofensivos ya que implican que el pueblo norteamericano ignora totalmente lo que estas etiquetas significan. Visitemos las definiciones. 
  El capitalismo es un sistema económico en el que los individuos privados y las empresas de negocios llevan a cabo la producción y el intercambio de bienes y servicios mediante complejas transacciones en las que intervienen los precios y los mercados.
 El fascismo es un corporativismo estatal totalitario y una economía dirigida mientras su base intelectual plantea una sumisión de la razón a la voluntad y la acción, un nacionalismo fuertemente identificado con componentes victimarios  que se conduce a la violencia contra los que se definen como enemigos por un eficaz aparato de propaganda, un componente social inter clasista, y una negación a ubicarse en el espectro político (izquierdas o derechas), lo que no impide que habitualmente la historiografía y la ciencia política sitúe al fascismo en la extrema derecha. Miles de norteamericanos dieron sus vidas luchando contra el Fascismo y el Nazismo en la Segunda Guerra Mundial.
 El socialismo es una ideología de economía política que defiende principalmente un sistema social, económico y político basado en la socialización de los medios de producción, o control administrativo colectivista, que puede ser no-estatal (propiedad comunitaria) o estatal (nacionalización), así como puede ser democrático u otro tipo de régimen . Por ello al socialismo se lo asocia desde las ideas de búsqueda del bien común e igualdad social hasta los proyectos de Estado socialista o al intervencionismo, definiciones de socialismo o de sus métodos que pueden variar drásticamente según el interlocutor. Lo que no impide que habitualmente la historiografía y la ciencia política sitúe al fascismo en la extrema izquierda. Miles de norteamericanos dieron su vidas luchando contra el Socialismo/Comunismo en la guerra fría.
 Amigo lector, decida usted la etiqueta que le queda bien al Presidente Obama.
 Es ofensivo que los mercaderes de mitos y mentiras pongan nuestro futuro y el futuro de la nación en peligro por el mero hecho de ganar una batalla política.
 Si el sistema de salud no se corrige su costo va a destruir nuestra sociedad. Tenemos el derecho a diferir con las políticas propuestas por Obama pero es nuestra obligación apoyar un cambio positivo que traiga competencia y menos costos  al sistema de salud.
<a href="mailto:uzal@msn.com">uzal@msn.com</a>) escribe desde West Palm Beach FL, sobre temas de interés para los hispanos parlantes.