El boxeador argentino tratará de recuperar su carrera profesional ante el tailandés Tewa Kiram
Por León Bravo 
Muy pocos boxeadores aguantan vivir en la sombra del retiro, y aunque su salud vaya de por medio, la adrenalina los vuelve a llamar al ring.
Ese es el caso del argentino Lucas Matthysse, quien el 27 de enero regresará a los cuadriláteros tras ocho meses de ausencia.
“No he peleado, pero me he mantenido entrenando para estar vigente en las 147 libras”, dijo Matthysse, quien enfrentará al tailandés Tewa Kiram en el Forum de Inglewood, California.
El pleito pondrá en juego el cetro vacante de peso welter de la Asociación Mundial de Boxeo y eso es una gran motivación para que el argentino haya decidido volver a pelear.
“Para mí es vital ganar esta pelea”, dijo Matthysse, quien a sus 35 años de edad quiere darle otra oportunidad al deporte de los puños.
“Estoy seguro que si le ganó a Kiram, me saldrán muchas y mejores peleas, pero por ahora solo estoy concentrado en mi próximo combate y nada más”, apuntó
En octubre de 2015, Matthysse se retiró de los cuadriláteros al ser derrotado por Viktor Postol en la pelea que definió al campeón de peso súper ligero del Consejo Mundial de Boxeo.
En ese pleito, Matthysse estuvo cerca de perder el ojo izquierdo por los golpes recibidos.
El año pasado, el argentino sólo peleó una vez y en esa ocasión venció por nocaut a Emmanuel Taylor en peso welter.
La del próximo 27 de enero será apenas el tercer combate de Matthysse en tres años.
“Estoy entrenando muy fuerte, hago rutinas de gimnasio, hago guantes con mis sparrings, he tenido un muy buen campamento”, afirmó.
Matthysse llegará a su pelea contra Kiram con una marca de 38 triunfos, cuatro derrotas y 35 nocauts mientras que su rival en turno se mantiene invicto con marca de 38 triunfos, 28 de los cuales han sido por la vía rápida.
“Kiram es un boxeador que muestra buenas cosas, lo hemos estudiado bien pero estamos confiados en que nuestra preparación nos dará el triunfo”, dijo Matthysse.
Lucas Matthysse regresa a los cuadriláteros tras ocho meses de inactividad. Foto-Internet