Por Marinee Zavala
La inauguración de la Garita Peatonal PedWest ha registrado serias afectaciones económicas en el sector comercial de San Ysidro que por décadas se dedicó a la venta de artículos y servicios justo en la entrada a Estados Unidos.
El principal mercado de esta zona se conforma de los 25 mil peatones que cruzan la frontera a pie desde Tijuana a la Unión Americana. Desde el pasado 15 de Julio, este flujo peatonal ha sido redireccionado hacia a la zona comercial oeste, donde se encuentran dos grandes plazas comerciales.
El proyecto PedWest parecía prometedor: una garita modernizada, con un mayor número de carriles, sistemas de seguridad y rapidez, donde una afluencia superior de ciudadanos podrían arribar a San Diego de forma eficaz.
Sin embargo, la zona estratégica en la que fue colocada esta garita llevó a miles de usuarios a cambiar de mercado. En lugar de consumir en comercios de pequeños empresarios cerca de la garita anterior, hoy son clientes de los centros comerciales de marca del otro lado del freeway 5.
“Se nos tenía que haber notificado”, aseguró Erika Elizondo, trabajadora de San Ysidro, quien dijo haber conocido a tiempo el proyecto. “Se pudo haber realizado un estudio que valorará de qué forma impactará el tráfico de la garita, y quienes se encontraban a sus alrededores, y así probablemente crear una estrategia de la que todos pudieran beneficiarse”.
Por más de un mes, los comerciantes de la zona han visto bajas en sus ingresos que anualmente proyectaban. Hoy, estos comerciantes temen por un futuro sin consumidores y la quiebra de sus negocios que por años sirvieron como su sustento y forma de vida.
“Me dijeron con apenas mes y medio de anticipación, que iban a abrir el puente peatonal. Ya no se podía hacer nada. Estamos conmocionados, esto nos afecta económicamente y moralmente”, señaló Bertha Alicia González, comerciante en San Ysidro desde 1962.
Otros empresarios ya comienzan a buscar espacio en la zona oeste de San Ysidro, que ya es ocupada por las grandes plazas y sus nuevos puntos de acceso fronterizo.
Para los pequeños empresarios que se aventuran a estos espacios comerciales del otro lado de las autopista 5, no sólo les espera el reto de encontrar nuevos clientes, o que los antiguos se adapten a su nuevo espacio, sino también a altas rentas que se comparan en precios por más del 100 por ciento. Rentas que en la zona este de San Ysidro oscilaban en los cuatro mil dólares, del otro lado de la carretera llegan a los 20 mil dólares por mes, cantidades difíciles de sobrellevar cuando se inicia de nuevo en un espacio diferente.
Este viernes 19 de Agosto, la comunidad afectada se reunirá en el número 378 E de San Ysidro Boulevard a las 10 a.m., para juntos formar una estrategia que ayude a mejorar la situación económica que actualmente atraviesan.
“Formaron un comité para despojarnos de nuestros valores, nuestros negocios, de todo, así que nos reuniremos y consultaremos abogados”, dijo González.
Estos comerciantes buscarán encontrar una alternativa que los ayude a mantener a salvo sus empresas que hasta la fecha se ven afectadas por un plan federal, que aseguren poco tomó en cuenta las repercusiones de alejar un sector de consumidores de esta zona mercantil de la frontera.