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<p>Para tres veteranos de color que fueron parte de un foro público esta semana, unirse a la militar fue una manera de escapar de sus diferentes realidades.</p>
<p>Los veteranos de los Marines Justice Castañeda, quien es un veterano de Operation Iraqi Freedom, Monica Ly, quien es una veterana de Operation Enduring Freedom, y Robert D. Lewis, quien es un veterano de Vietnam, todos tuvieron razones de familia y personales para unirse al servicio militar.</p>
<p>Castañeda creció en una familia disfuncional, donde su padre rara vez se aparecía, y su madre no tenía hogar. Él miraba como muchos de sus amigos de la high school estaban muriendo a causa de la violencia de las pandillas, así que el servicio militar se convirtió en un lugar seguro.</p>
<p>“Llegué al reclutador, rogándole que me ayudara a salir de todos estos problemas”, dijo Castañeda. “La militar fue el primer lugar donde encontré libertad. Fue el primer lugar donde estuve saludable, donde tenia seguras mis tres comidas al día, donde tenía un lugar seguro para dormir ocho horas”.</p>
<p>Castañeda añadió que la militar “me dio una razón para vivir. La militar salvó mi vida”.</p>
<p>Algo similar ocurrió con Ly, quien es hija de refugiados camboyanos. Ly creció en el Condado de Los Ángeles, donde muchos en su familia eran pandilleros. Ella dijo que hasta consideró unirse a una pandilla para encajar. Durante la high school, después de que su hermano mayor se unió a los Marines, ella decidió que era la ruta que quería seguir.</p>
<p>Sus padres se oponían a su decisión, y después de hacer un trato con ellos, se unió a la reserva de los Marines.</p>
<p>“Unirme a los Marines era una manera de escapar toda la violencia pandilleril que me rodeaba”, dijo Ly. “También pensé que era lo más honorable para hacer para servir a mi país”.</p>
<p>Para Lewis, el servicio militar también fue una manera de escapar de su vida familiar, pero su experiencia fue completamente distinta. Él venía de “una familia amorosa que iba a la iglesia”. Sus padres formaron un hogar estable, donde él era el menor de sus hermanos, así que, aparentemente, vivía en un mundo perfecto. Aunque su familia era afroamericana, viviendo en un periodo de segregación social, su familia no enfrentó discriminación mayor, dijo.</p>
<p>“Necesitaba un cambio”, dijo. “Pero nunca me imaginé que cambio iba a experimentar cuando me uní a los Marines.</p>
<p>Los Marines anglosajones me llamaron todo lo imaginable excepto por el nombre que Dios me había dado. Fui humillado todo el tiempo”.</p>
<p>Los tres veteranos compartieron sus experiencias con el público en Changing Faces: Diversity and the Veteran Experience, una conversación pública presentada por Cal Humanities el miércoles, 11 de junio, en la biblioteca central de San Diego.</p>
<p>El panel de discusión fue moderada por Jorge Mariscal, profesor de español y literatura chicana en UCSD y un veterano de la guerra de Vietnam.</p>
<p>El evento es parte de War Comes Home, una iniciativa estatal de Cal Humanities acerca de los veteranos regresando a California. La conversación pública en San Diego es uno de cinco eventos por todo California este verano diseñados para explorar diferentes facetas de la experiencia de los veteranos, de acuerdo a los organizadores.</p>
<p>Para conocer más acerca de War Comes Home, visite <a href="http://www.calhum.org/programs/war-comes-home" target="_blank">calhum.org/programs/war-comes-home</a>.</p>