LA COLUMNA VERTEBRAL
El Soporte Informativo Para Millones de Hispanos
Por Luisa Fernanda Montero
Juan Manuel Heredia llegó a Estados Unidos de la mano de sus padres cuando tenía apenas cuatro años. Vivió su infancia y su tierna juventud como cualquier americano, hasta que se enteró de que no lo era.
Cuando quiso realizar el proceso requerido para obtener su licencia de conducción, Juan Manuel se encontró de frente con una realidad que ignoraba por completo. Era indocumentado.
El caso de Juan Manuel no es único. Muchos padres, por diversas razones, les ocultan a sus hijos la verdad de su situación en Estados Unidos. Pero como reza el adagio popular, no hay nada oculto bajo el sol. Si usted se encuentra en una situación similar, este es el momento de enfrentarla. La acción diferida le está abriendo las puertas a miles de jóvenes, que como Juan Manuel, no solo necesitan si no que merecen una oportunidad.
Juan Manuel, quien hoy tiene 16 años, fue uno de los primeros 29 dreamers o soñadores admitidos por el Departamento de Seguridad Nacional bajo la Acción Diferida para los Llegados en la Infancia –DACA– recientemente aprobada por el gobierno.
“Yo quiero ser un ingeniero mecánico, terminar el High School y el College y tener un futuro acá en América, no me quiero salir de acá, este es mi país”, dijo Juan Manuel en los estudios de Bienvenidos a America de La Red Hispana en Washington, donde con un marcado acento argentino afirmó que el proceso es simple y rápido y llamó a los jóvenes como él a no desistir en la búsqueda de sus sueños.
El abogado de inmigración Silverio Coy, está de acuerdo con Juan Manuel, el proceso es sencillo pero hay que hacerlo bien. “Hay que someter los documentos adecuados, firmados y apoyados con documentación que demuestre la presencia física del menor desde que llegó a los Estados Unidos”, señaló Coy, quien además insistió en que es indispensable buscar la asesoría adecuada para no cometer errores.
Recuerde que a la hora de diligenciar los formularios –I-821D, I-765 e I-765WS–debe asegurarse de que no haya imprecisiones, errores o evasiones. La acción diferida beneficia a aquellas personas que tenían menos de 31 años al 15 de junio de 2012, que habían residido continuamente en los Estados Unidos por un período mínimo de cinco años antes de esa fecha, y que estaban físicamente en el país en ese momento y en el momento mismo de solicitar la acción diferida.
Los solicitantes deben además estar asistiendo a la escuela, haberse graduado de la escuela superior, poseer un Certificado de Educación General -GED- o haber servido honorablemente en la Guardia Costera o en las Fuerzas Armadas de los Estados Unidos.
El abogado Silverio Coy recalcó que quienes pretendan beneficiarse de este recurso no pueden tener ningún tipo de record criminal.
La acción diferida puede cambiar el futuro de miles de jóvenes. Mientras continuamos luchando por que el congreso apruebe definitivamente el acta de los sueños, esta herramienta puede hacer la diferencia. Recuerde que el miedo no es buen consejero, asesórese. Como Juan Manuel, todos los jóvenes tienen derecho a defender sus sueños y a alcanzar sus metas, este es el momento, no lo deje pasar.
Para saber más puede visitar www.uscis.gov encontrará toda la información en español, o llame al 1-800-248-3232 los jueves a las 2pm hora del este, al programa Bienvenidos a América de La Red Hispana.