Pedaleando por una esperanza de vida

<p></p>
<p>&nbsp;&nbsp;&nbsp; Más de 2 mil 500 ciclistas de ambos lados de la frontera participaron el pasado sábado 19 de marzo en la segunda edición del paseo familias “Pedaleando Por una Esperanza de Vida”, organizado por la Fundación Castro Limón (FCL) a beneficio de los niños con cáncer de Baja California.</p>
<p>&nbsp;&nbsp;&nbsp; La FCL es una organización ciudadana no lucrativa fundada en 2002 cuando Juan Carlos Castro Munguía e Irineo Limón Vargas, jóvenes empresarios bajacalifornianos fueron diagnosticados con cáncer y soñaron con crear una fundación para ayudar a niños enfermos a sobrevivir esta enfermedad.</p>
<p>&nbsp;&nbsp;&nbsp; Haciendo honor a la memoria de estos jóvenes, sus familiares ahora trabajan para recaudar fondos para la atención médica de más de 35 niños.</p>
<p>&nbsp;&nbsp;&nbsp; En 2010 crearon un paseo ciclista de 60 kilómetros llamado “Pedaleando por una esperanza de vida”, que inició en los antiguos estudios FOX de Playas de Rosarito y terminó en los viñedos Bibayoff del Valle de Guadalupe en Ensenada.</p>
<p>&nbsp;&nbsp;&nbsp; Los resultados del primer paseo fueron muy positivos para la organización. En su segunda edición, el paseo ciclista fue todavía más exitoso.</p>
<p>&nbsp;&nbsp;&nbsp; Para Julia Limón, consejera de la fundación y organizadora del evento, los resultados fueron mejores de los esperados.</p>
<p>&nbsp;&nbsp;&nbsp; “La verdad quedamos encantados con la participación de los ciclistas, de los patrocinadores y de todas las dependencias de gobierno que nos apoyaron en el evento” sostuvo Limón, placenteramente sorprendida por el ambiente positivo de convivencia familiar y fomento del deporte.</p>
<p>&nbsp;&nbsp;&nbsp; El registro oficial comenzó desde muy temprano el sábado, con la ayuda de cientos de voluntarios de la Fundación y las empresas patrocinadoras. El paseo arrancó a las 10:00 horas a la altura del kilómetro 35 de la carretera libre Tijuana–Ensenada.</p>
<p>&nbsp;&nbsp;&nbsp; Durante la mayor parte del paseo los ciclistas disfrutaron del hermoso paisaje de la costa de Rosarito y después el escenario campestre de la famosa Ruta del Vino de Ensenada durante el último tramo del paseo.</p>
<p>&nbsp;&nbsp;&nbsp; La inscripción de 300 pesos en preventa y 350 el día del evento, incluía agua y plátanos en los cuatro puntos de hidratación del recorrido y camisetas conmemorativas a los primeros mil 500 ciclistas en llegar a la meta. Además contaban con asistencia técnica y médica durante el trayecto, así como seguros contra accidentes.</p>
<p>&nbsp;&nbsp;&nbsp; Los participantes que físicamente no pudieron continuar su camino fueron recogidos por la “barredora”, un vehículo que transportó a los ciclistas y sus bicicletas hacia la meta. Las Policías de Rosarito y Ensenada, así como la Policía Federal, vigilaron el tráfico vehicular durante todo el recorrido.</p>
<p>&nbsp;&nbsp;&nbsp; La meta fueron los viñedos Bibayoff, propiedad de una familia productora de vino de origen ruso establecidos en el Valle de Guadalupe hace más de 100 años y que continúa con la tradición vinícola de sus antepasados.</p>
<p>&nbsp;&nbsp;&nbsp; A su arribo a la meta los participantes disfrutaron de una verbena con comida, vino y música, un evento para toda la familia.</p>
<p>&nbsp;&nbsp;&nbsp; Ante el éxito obtenido los organizadores han decidido programar una tercera edición del paseo para 2012.</p>
<p><strong>La Fundación Castro-Limón</strong><strong></strong></p>
<p>&nbsp;&nbsp;&nbsp; Los fondos recaudados serán destinados para la atención de niños con cáncer que requieren tratamientos de alrededor de dos meses de quimioterapia, los cuales tienen un costo de aproximadamente 300 mil pesos.</p>
<p>&nbsp;&nbsp;&nbsp; Desde 2006 la Fundación Castro-Limón opera el Centro Oncológico-Pediátrico de Baja California en la ciudad de Tijuana, un complejo médico diseñado específicamente para brindar un tratamiento integral a los infantes.</p>
<p>&nbsp;&nbsp;&nbsp; Este es el único hospital en su tipo en todo México y ha brindado atenciones a más de 700 niños y sus familias, “porque cuando se enferma el niño se enferma toda la familia” dijo Julia Limón.</p>
<p>&nbsp;&nbsp;&nbsp; Explicó que además del tratamiento contra la enfermedad, los niños reciben apoyo psicológico desde el incio de su tratamiento, “porque cuando se enferman lo primero que piensan es que ya no van a estar en este mundo”.</p>
<p>&nbsp;&nbsp;&nbsp; También consideró importante atender exclusivamente a niños, porque de otra manera son atendidos junto con adultos y ancianos, lo que puede llegar a impactar emocionalmente a los pequeño, “por eso decimos que es un tratamiento integral” agregó.</p>
<p>&nbsp;&nbsp;&nbsp; Orgullosa de la labor del trabajo de los integrantes de la Fundación, Julia explicó que en sus nueve años de trabajo la Fundación Castro-Limón ha contribuido al aumento en la expectativa de sobrevivencia de los niños con cáncer en Baja California de un 6 a un 8.4 por ciento.</p>
<p>&nbsp;&nbsp;&nbsp; “Para muchos niños esta Fundación ha sido una esperanza de vida”.</p>

Category
Author
Mariana Martinez