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<p>Como un brioso jinete del Apocalipsis, el tema de la inseguridad pública adquiere preponderancia en el texto del mensaje presidencial del pasado 2 de septiembre.</p>
<p>El presidente reconoce que la ciudadanía está inconforme con los resultados que en esa materia ha podido ofrecer la actual administración y que están muy lejos de las promesas de su campaña; huelga decir que la seguridad es la primera responsabilidad del Estado y para ello dispone del monopolio de la fuerza para combatir las conductas delincuenciales.</p>